10 diciembre 2012

Guerra de tronos 2030


Javier Valenzuela - CCS


¿Terminará deshaciéndose de facto la Unión Europea? Hoy, esa hipótesis ya no es descartable. Reino Unido bien podría largarse en ese referéndum con el que sueña David Cameron, y Alemania, una vez España, Italia, Grecia y Portugal devueltos a su condición anterior a la construcción europea, bien podría seguir el camino que citan con creciente desparpajo sus políticos y periodistas conservadores: constituir, con algunos vecinos de la Europa central, oriental y septentrional, un club basado en un euro fuerte y una disciplina presupuestaria de acero. París quedaría así en el limbo y Berlín sería la capital de una nueva potencia germana, esta vez, financiera y económica.

09 diciembre 2012

El Acuerdo Trans-Pacífico de Asociación Económica (TPP) como golpe global


¿Por qué tanto secreto?

Andrew Gavin Marshall - Occupy.com/Truth-out

Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens


En la cumbre de dirigentes de los Estados miembros del Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económica (TPP) en noviembre de 2010 participaron: Japón, Vietnam, Australia, Chile, Singapur, EE.UU., Nueva Zelanda, Brunei, Perú y Malasia.

El Acuerdo Estratégico Trans-Pacífico de Asociación Económica (TPP) es la negociación comercial más secreta y “menos transparente” de la historia.

Sí que hay dinero


Vicenç Navarro - CCS

Durante el debate parlamentario el ministro español de Hacienda, Cristóbal Montoro, indicó que éstas eran necesarias porque “el Estado no tenía más dinero”, punto acentuado por el propio Rajoy cuando subrayó que el nivel de deuda pública en España había alcanzado niveles inaceptables que forzaron la toma de medidas excepcionales, considerando la bajada del déficit como la prioridad número uno de su gobierno. El presidente indicó que tal bajada del déficit público era la condición indispensable para salir de la crisis, pues sólo con esta bajada se recuperaría la confianza de los mercados financieros y España podría volver a recibir prestado dinero a unos intereses más bajos.

08 diciembre 2012

Empezar de cero


Lluís Uría - La Vanguardia

L’espoir est un scepticisme. C’est douter du malheur un instant.
Paul Valéry

A una persona se le puede quitar todo. Pero no se le puede arrebatar el futuro. No se le puede negar la esperanza. “El fin de la esperanza es el principio de la muerte”, dijo Charles De Gaulle, quien en 1940 se levantó en armas contra el destino. A miles de personas se les está robando hoy el futuro en España. En la calle, sin nada, sepultadas por una deuda imposible, se les impide volver a empezar. Uno puede caer, hincar la rodilla en el suelo. Pero debe tener la oportunidad de poder levantarse otra vez.

La plaga de desahucios en España ha tenido que adquirir proporciones estratosféricas para que por fin los responsables políticos hayan tomado conciencia del drama que golpea a miles de familias, condenadas –por una lógica perversa- a pagar el resto de sus vidas por una vivienda que ya no poseen. La –necesaria e imprescindible- salvación de los bancos y las cajas de ahorros, envenenados por el monstruo de ladrillo que irresponsablemente contribuyeron a crear, no puede ser al precio de tamaña tragedia.

No hace falta irse muy lejos para ver cómo se aborda el mismo problema en otros países. En Francia, de entrada, cada invierno hay una tregua oficial por la cual queda absolutamente prohibido, desde finales de octubre a mediados de marzo, echar a nadie de su casa. Deba lo que deba. Se lo deba a quien se lo deba. Es un parche, sí. Pero no es el único amparo. Mucho más importante y decisivo, la ley prevé un procedimiento para saldar todas las deudas en caso de imposibilidad manifiesta de devolverlas. Una comisión del Banco de Francia es la encargada de estudiar caso por caso y buscar una solución adaptada: reescalonamiento de los pagos, moratoria en el retorno de la deuda o liquidación de todos los bienes del deudor para saldar lo que se pueda. En este último caso, que debe ser avalado por un juez, el resto de la deuda queda oficial y definitivamente borrado. A uno no le queda nada, pero puede empezar de cero.

Mecanismos parecidos existen en Alemania, en Bélgica, en Canadá, en Suiza. Probablemente hay otros ejemplos en el mundo, otras ideas en las que inspirarse, para tratar de encontrar una solución a este grave problema. La imaginación tampoco es la mayor de nuestras carencias. Lo que hace falta, por encima de todo, es un poco de humanidad. Si negamos la esperanza a quienes se han quedado en la cuneta, nos la estamos negando a nosotros mismos.

Capitalismo y Fracaso


Adrián Carmona - Rebelión

Inténtalo otra vez. Fracasa otra vez. Fracasa mejor.
Samuel Beckett [1]

Escuchando a los apologetas del capitalismo, tan habituales en nuestros tiempos, podría parecer que el capitalismo no admite el fracaso per se. Por otra parte, ante dicha pureza inmaculada e incorruptible del statu quo suele anteponerse con frecuencia [2] el supuesto fallo irrefutable no sólo de experiencias que se denominaban comunistas o socialistas sino de la misma idea de igualdad. En nuestra sociedad ultraconsensual [3], que celebró con grandes faustos la desaparición de la experiencia soviética como el certificado de defunción de cualquier intento de metarelato, la idea de igualdad y el ánimo de transformación social no representan sino la pantalla fantasmagórica de su \emph{verdad}, un núcleo totalitario que tarde o temprano terminará generando monstruos como los que alegremente son descritos por la prensa liberal [4]. La crainte des masses, el miedo a un supuesto exceso democrático, es el pilar fundamental del pensamiento conservador [5]. Ante ello, solo nos queda la gestión de lo posible, la aritmética parlamentaria, la “despolitización” de la política, la gobernanza, el gobierno de los técnicos, … diques de contención ante la pretendida pulsión violenta e irracional de la mayoría.

Amnistía fiscal, ¿por qué aquí sí y en Alemania no?


Alberto Montero Soler - Financial Red


Esta semana acaba el plazo para que todos aquellos que se han enriquecido defraudando a Hacienda durante los opulentos años de la burbuja inmobiliaria puedan lavar su dinero al módico precio de una comisión del 10% de lo que decidan blanquear. Esa es la salida que ofreció en su momento el ministerio de Hacienda a los patrioteros que se llenan la boca de España y las muñecas de pulseras con los colores de la bandera para, a continuación, estafar al resto de sus conciudadanos.

07 diciembre 2012

El expolio de Europa


Hans Magnus Enzensberger - CCS

¿Crisis? ¿Qué crisis? Los cafés, las terrazas, los restaurantes no se quedan vacíos, los turistas se atropellan en los aeropuertos, se nos habla de récords de exportaciones, de que el paro disminuye. La gente bosteza ante la “cumbre” política de cada semana y las oscuras disputas de los expertos.

Es manifiesto que casi nadie se percata de que los países europeos ya no están gobernados por instituciones que cuenten con una legitimidad democrática, sino por una ristra de siglas que han ocupado su lugar. Ahora mandan el MEDE, el FEEF, el BCE, la ABE y el FMI. Solo los iniciados llegan a comprender quién hace y cómo en el seno de la Comisión Europea y del Eurogrupo. Todos esos organismos no figuran en ninguna constitución del mundo y no asocian a los electores a su toma de decisiones.

Algunos números de la crisis


Pascual Serrano - Mundo Obrero

Un goteo de noticias y datos nos pueden ayudar a visionar la debacle económica a la que se acerca Europa y en la que ya estamos inmersos países como Grecia, Portugal, España e Italia. 

En Portugal los jóvenes están emigrando hacia sus excolonias en África y Brasil. En los primeros cuatro meses de 2012, 85 portugueses se dieron de baja cada día del Instituto de Desempleo para emigrar, según los datos del centro. En total, 10.200 personas anularon su solicitud de trabajo, más del doble que en 2008. Otros ni se molestan en pasar por las oficinas de empleo, de la facultad van directos al aeropuerto. Según datos del secretario de Estado de las Comunidades Portuguesas, en 2011 emigraron entre 120.000 y 150.000 portugueses, unos datos que rozan las mayores oleadas de emigración de los años sesenta y setenta. Su destino: Mozambique, Angola o Brasil (Eldiario.es, 17-10-2012).

06 diciembre 2012

Riesgo soberano y emisiones bancarias


Alfonso García Mora | El País

Uno de los aspectos más preocupantes desde que comenzara la crisis en España ha sido el elevado volumen de financiación que tiene el sector privado en los mercados de capitales internacionales. El ejemplo más claro es el sector bancario, con vencimientos anuales en torno a los 100 mil millones de euros. En situaciones normales, esta dependencia no debería ser un problema. Sin embargo, la capacidad del sector privado para emitir bonos en los mercados se encuentra muy condicionada, entre otros factores, por la evolución del riesgo soberano, que aproximamos a partir de la diferencia entre el tipo de interés de la deuda española y la alemana. En momentos en los que el riesgo soberano aumenta, se produce un efecto prácticamente directo sobre el resto de emisores privados de ese país, dando lugar a un incremento sustancial del tipo de interés que han de pagar a los inversores para captar nueva financiación. En el extremo, esta demanda puede incluso llegar a ser nula, aún a precios sustancialmente elevados, tal y como ha ocurrido durante algunos meses en los últimos dos años.

De hecho, una de las pocas señales favorables a las que hemos asistido desde la aprobación por parte del BCE del programa OMT a principios de septiembre, y en definitiva desde que se articulara el marco mediante el cual se acotaba el riesgo soberano en España, procede precisamente de la reanudación de las emisiones de los bancos españoles. Como puede observarse en el siguiente gráfico, desde enero a abril se realizaron emisiones por un volumen aproximado de 15 mil millones de euros, para luego entrar en una fase en la que literalmente se “secó” el mercado, y sólo a partir de septiembre han comenzado a realizarse nuevas emisiones. Tanto en 2011 como en 2012, se puede apreciar como los momentos en los que las entidades no pudieron realizar emisiones en los mercados coincidían precisamente con el mayor repunte en el diferencial de la deuda soberana.

Por tanto, toda decisión encaminada a una reducción del diferencial, o por lo menos a evitar repuntes sustanciales como los observados en otoño de 2011 o primavera de 2012, debe ser objetivo prioritario. No ya sólo por el impacto directo que ello tiene en la capacidad de financiación del Tesoro, y el consiguiente efecto sobre los costes financieros de las cuentas públicas, sino también por las consecuencias para el resto del sector privado. El ejemplo más claro es el del sector bancario, que además de verse afectado de forma directa en su capacidad para realizar nuevas emisiones, también tiene un efecto muy importante en el resto de productos bancarios. Tal es el caso de los depósitos minoristas, cuyo coste guarda una elevada correlación con la capacidad para realizar emisiones de bonos, y, en última instancia, con el riego soberano. Esta estrecha interrelación será especialmente relevante durante los tres próximos años, en los que el sector bancario español tiene que hacer frente al vencimiento de aproximadamente 300 mil millones de euros.


Democracia de calidad frente a la crisis

Victoria Camps, Adela Cortina y José Luis García Delgado - CCS

Un gran número de españoles está viviendo la crisis actual como un auténtico fracaso del país en su conjunto. Hace ya más de tres décadas emprendimos una transición política y social que, con sus luces y sombras, como todo en este mundo, se ha convertido en una auténtica referencia para algunos países deseosos de dar el paso de la dictadura a la democracia.

05 diciembre 2012

Más allá del precipicio fiscal


Por: Paul Krugman - El País

Parece que Brian Beutler, de Talking Points Memo, ha sido el primero en usar la frase “bomba de la austeridad” para describir lo que está previsto que ocurra en Estados Unidos a finales de este año. Es una expresión mucho mejor que “precipicio fiscal”. Lo de precipicio hace que la gente imagine que es un problema de déficits excesivos cuando, realmente, se trata del riesgo de que el déficit sea demasiado pequeño; asimismo, y en relación con lo anterior, lo de precipicio fiscal induce a una confusión en la que la gente dice, “Entonces, ¡esto significa que tenemos que promulgar la ley Bowles-Simpson y aumentar la edad de jubilación!”, y ninguna de las dos cosas tiene nada que ver con ello.

Con austeridad, peor que hace cinco años

Xavier Caño Tamayo - CCS

 
Francisco es un joven español, licenciado universitario. Emigró a Alemania y encontró empleo en una empresa de mudanzas con un contrato minijob, jornadas laborales inacabables cargando muebles y un salario corto; cambió a un restaurante de comida italiana en un centro comercial; es menos cansado, pero ahora gana la mitad sin contrato ni seguro médico. Hay muchos Franciscos, porque en Alemania también hay paro, trabajo precario y salarios de porquería.

04 diciembre 2012

Grecia o cómo negar la evidencia


Victoria Carvajal - El País


¿Qué hace falta para que Europa cambie de rumbo? ¿Por qué insiste en negar que los severos planes de ajuste están deprimiendo la actividad mucho más de lo previsto? ¿De verdad se cree que es posible reducir el endeudamiento sin crecimiento? ¿Por qué, en defenitiva, seguir negando la evidencia? Grecia acumula 16 trimestres de crecimiento negativo, Irlanda, 12, Portugal, siete, España, cuatro... La Unión Europea en su conjunto ha entrado oficialmente en recesión este último trimestre... La idea de que los recortes acabarían teniendo efectos expansivos en las economías ha demostrado ser equivocada. Las previsiones de todos los organismos internacionales, las últimas son las de la OCDE, lo confirman: la principal amenaza para el crecimiento de la economía mundial sigue siendo la eurozona.

No obstante, los fundamentalistas de la austeridad, los países acreedores liderados por Alemania, siguen sin dar su brazo a torcer. Por mucho que quieran negarlo e intenten convencer a sus electorados de que su firmeza les está permitiendo reducir el desvío de fondos a los países deudores, el resultado es que la austeridad no hace más que abultar la factura de las transferencias de cara al futuro: cuanto más se agudiza la recesión, más se alejan los objetivos de consolidación fiscal y más se alarga la dependencia de estos de la ayuda internacional para pagar sus deudas. Pero nadie se atreve a llevar la contraria a Berlín.
En Washington, sin embargo, hay una mujer, Christine Lagarde, que desde la dirección del Fondo Monetario Internacional, está dispuesta a dar la batalla. Su determinación le ha llevado a enfrentarse abiertamente con Alemania en las negociaciones para desbloquer el enésimo paquete de ayuda a Grecia. Lagarde pedía en vano "más realismo" para alcanzar una solución definitiva a la crisis de la deuda griega, similar a las aplicadas en Latinoamérica o en Polonia en los noventa. Para ello, sugería, los acreedores soberanos (sus socios europeos) deben aceptar una quita similar al 50% negociada con los privados a principios de año. Sólo así el país puede reducir su endeudamiento a un nivel que le permita volver a crecer. Lo demás, es decir, el acuerdo cerrado el lunes de madrugada, que alarga los plazos de devolución y reduce los intereses de los préstamos, es simplemente retrasar (y encarecer) esta decisión unos meses... Tal vez ¿hasta septiembre? ¿Una vez que Alemania haya celebrado sus elecciones?

Es probable que Lagarde esté cansada de la manera de hacer de sus socios en la troika (la UE y el BCE): reuniones maratonianas para avanzar poco o nada. Hacer previsiones es tarea inútil. La deuda de Grecia llegará a representar el 190% de su PIB en 2014. Hace seis meses, el FMI preveía que esta se situaría en el 160%. Así no hay quien avance... Lagarde tiene además que rendir cuentas antes el resto de sus países miembros en el uso de los recursos de la institución y países como China, Rusia o Brasil no ven con buenos ojos la excesiva exposición del Fondo a la crisis de la eurozona.

Pero quizá lo que marca un antes y un después en las relaciones del FMI y la Unión Europea ha sido la publicación de un informe muy crítico con la austeridad. Fue en octubre, durante las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial, celebradas este año en Tokio. En el estudio se demuestra que el impacto de las políticas de ajuste en el crecimiento (se calcula sobre la base de un multiplicador) está siendo mayor de lo previsto y que por tanto no van a servir para reducir la deuda en el plazo esperado. Sobre todo, si la política monetaria, como en el caso de la eurozona, no puede compensar los efectos de estos recortes. La conclusión del mismo es clara: la austeridad lleva a un callejón sin salida. En el caso de España, por ejemplo, el ajuste de 65.000 millones de euros a repartir en dos años debería provocar una caída del PIB cercana al 3%, muy superior al 0,5% que está calculando el Gobierno para 2013.

En este sentido, Grecia de nuevo es el caso más extremo: el ajuste presupuestario exigido por la troika a cambio de sendos paquetes de ayuda, por valor de 110.000 y 130.000 millones de euros, no le ha permitido alcanzar ninguno de los objetivos fijados en lo que se refiere al déficit, deuda, ingresos por privatizaciones, etc... ¿Puede tener que ver el que su PIB haya caído un 20% en los últimos cuatro años?




Alternativas a los recortes


Vicenç Navarro - CCS

La solución a la crisis económica pasa por romper el círculo vicioso que inicia con un endeudamiento que quiere resolverse a base de políticas de austeridad que determinan un descenso de la actividad económica y de los ingresos al Estado, lo cual lleva a pedir prestado más dinero y a endeudarse. Este círculo vicioso es lo que está llevando la Eurozona al desastre.

03 diciembre 2012

Alertan sobre repunte de la inequidad económica en EE.UU.


PRENSA LATINA

Washington, 27 nov (PL) La diferencia de bienestar entre la clase pudiente de Estados Unidos y el resto de la población se disparó hasta niveles astronómicos durante las pasadas tres décadas, mientras los ingresos de la familia promedio son los peores desde 1969.

Un informe del economista y catedrático de la Universidad de Nueva York Edward Wolff, quien estudió el movimiento de los dividendos ciudadanos entre 1983 y 2010, refleja que la clase media norteamericana tiene las más bajas utilidades en 43 años.

En la etapa mencionada, la disparidad en cuanto a ingresos monetarios aumentó significativamente en el norteño país sobre todo como consecuencia del quebranto de las inversiones en el sector inmobiliario, que afectó con énfasis a activos de la comunidad trabajadora.

De acuerdo con el Reporte Wolff, mientras una familia de clase media perdía un 18 por ciento de sus entradas financieras, aquellos ciudadanos incluidos en el uno por ciento poblacional -los más acaudalados- vieron incrementar sus ingresos en 71 por ciento.

En 2010 también el salario promedio anual decreció hasta sus peores niveles desde 1999, unos 26 mil 360 dólares, y como resultado una persona dentro del llamado uno por ciento disfrutada de valores 288 veces superiores al de un ciudadano estadounidense promedio.

La Gran Recesión que golpeó a la industria nacional entre 2007 y 2010 provocó que el bienestar económico de las familias de clase media decayera un 38,8 por ciento durante ese período, con mayor perjuicio para aquellos individuos entre 35 y 44 años.

El presidente Barack Obama adelanta desde inicios de 2012 una campaña pública para consolidar el apoyo ciudadano hacia su iniciativa relacionada con el aumento de impuestos a los más ricos como medio de contrarrestar el déficit.

Obama se ha reunido con líderes sindicales, representantes del sector privado empresarial y delegados de ambos partidos políticos con la meta de ganar adeptos para una propuesta de incrementar gravámenes desde 35 hasta 39,6 por ciento.

El propósito del mandatario demócrata apunta hacia aquellos ciudadanos con ingresos mayores de 250 mil dólares anuales, una porción de la población beneficiada con pactos legislativos certificados durante la administración de George W. Bush.

Según cálculos de la Casa Blanca, el fin de la era-Bush de privilegios fiscales podría aportar un adicional de 440 mil millones de dólares de recaudos gubernamentales en los próximos 10 años.

Una cifra record de 42,2 millones de estadounidenses celebró el reciente Día de Acción de Gracias bajo el programa federal de auxilio para pobres que reparte estampillas con derecho a comidas subsidiadas.
Acorde a un estudio del foro Sunlight Foundation, el uso de los bonos para alimentos se disparó en Estados Unidos desde el colapso del sistema financiero hace cinco años. Esta opción aumentó en 70 por ciento desde 2007 y no disminuirá hasta que caigan los números del desempleo.






El ataque alemán desahucia a España


MANUEL BALLBÉ / YAIZA CABEDO - El País

El pánico financiero y la austeridad que impone Alemania le reportan grandes beneficios y favorecen la apuesta de los grandes especuladores contra las deudas soberanas de los países del sur de Europa

Los economistas reiteran hasta la saciedad que la imposición merkeliana de austeridad es un error, pero siguen sin entender que se trata de una truculenta estrategia del Gobierno y la banca alemana para desvalijar al sur de Europa con el fin de tapar el enorme agujero financiero alemán. Este expolio es posible debido a una desregulación jurídica que desde 2000 ha desplazado el capitalismo productivo por un “mercado casino” sin supervisión administrativa, en el que ha quedado suprimido el delito de información privilegiada y que funciona mediante apuestas en las que no hay que identificarse. Esta bolsa privada y sin transparencia, localizada en Nueva York y Londres, está en manos de un cartel compuesto por seis megabancos norteamericanos y seis europeos, todos quebrados y rescatados por sus Gobiernos, es decir, por los contribuyentes.

La crisis: labrada en la creación del euro


Alejandro Nadal - La Jornada

Rn los orígenes y marco institucional de la unión monetaria europea se encuentran los elementos para interpretar la crisis. Lo cierto es que nunca antes en la historia se había intentado establecer una moneda común sobre bases tan erradas. El resultado fue una bomba de tiempo. En el capitalismo las crisis son la norma y la detonación no se hizo esperar.

Hay que señalarlo desde el principio: en la creación del euro hay un rompimiento, sin paralelo en la historia, entre el control de la creación monetaria y el poder soberano de los Estados.

02 diciembre 2012

La deuda y la pérdida de soberanía


Julio Gambina, ArgenPress

Mucho se habla en estas horas de los “fondos buitres”, a propósito del embargo sobre la Fragata Libertad retenida en el Puerto de Ghana; y es verdad que esos fondos de inversión pueden asimilarse a las aves de carroña, que rondan a la presa en dificultades para alimentarse de la desesperación en la agonía de cuerpos en dificultades.

El interrogante es si la Argentina es una presa agonizante y apetecible para los buitres del sistema capitalista.

No parece la Argentina vivir un tiempo de agonía. Es cierto que el 2012 se desaceleró la economía, pero en un marco de una década de crecimiento importante, y además, si en 2001 declaró la cesación de pagos por 100.000 millones de dólares, con los canjes del 2005 y del 2010, renegoció el 93%, y desde entonces es un país cumplidor de sus compromisos de pagos externos.

Más que en agonía, la Argentina parece atravesar un periodo de acumulación capitalista saludable, y cuando en el mundo son noticias los países con dificultades para cancelar su deuda soberana, desde Buenos Aires se desmienten agoreros pronósticos, y se cumple rigurosamente con los pagos de la deuda pública.

El país generó las condiciones para salir del default declarado a finales del 2001, y pagando sus deudas intentar volver al mercado financiero mundial.

No es que estemos de acuerdo, más bien todo lo contrario, pero pretendemos explicar lo que está ocurriendo con un tema estructural del orden económico en el país y en el mundo, el del endeudamiento y la dependencia que genera la situación respecto del capital hegemónico, muchas veces, convengamos, depredador y carroñero.

El objetivo era y es pagar la deuda

La Argentina es un fiel cumplidor de sus obligaciones externas, y el gobierno se jacta de ello, aun manteniendo un 7% de la deuda en conflicto (holdout) y un monto similar impago al Club de París, una deuda que en variadas ocasiones se anunció la voluntad de negociar y cancelar.

Se puede pensar que la Argentina le encontró la vuelta al endeudamiento, pues no solo “arregló” con la mayoría de los acreedores, sino que también paga regularmente sus obligaciones.

Claro que es una pesada carga en el presupuesto que se acaba de aprobar para el 2013 y además, se establecen casi 8.000 millones de dólares de las reservas internacionales para cancelar vencimientos del próximo año, y más de 80.000 millones de pesos de nueva deuda.

Para que no haya dudas, esta semana la Presidente aseguró que en diciembre próximo se cancelarán en dólares los vencimientos de bonos del Estado Nacional. El objeto de la información era desanimar a aquellos que creen que la Nación seguiría el rumbo de la pesificación que ya empezaron a transitar algunas provincias, y que parece será el rumbo a seguir por otros Estados provinciales.

Claro que la pesificación viene inducida de múltiples acciones, no solo respecto de la restricción a la compra venta de divisas, o al uso cotidiano de las divisas en las relaciones mercantiles, sino al canje poco analizado de deuda nominada en moneda extranjera por endeudamiento en pesos argentinos.

El mecanismo transita por la cancelación de deudas con divisas, disminuyendo las reservas internacionales y reemplazándolas por compromisos futuros en pesos del tesoro nacional al BCRA.

De este modo, el BCRA acumula deuda a cancelar por futuros gobiernos y se transfieren divisas a los históricos acreedores de la deuda pública de la Argentina. Así, la Argentina paga su deuda con dólares y acumula nuevas deudas en pesos, las que imaginamos renovarse en continuo y condicionando el presente y el futuro soberano.

Las cancelaciones de deuda y las sucesivas negociaciones, no solo en esta década, sino en cada uno de los turnos constitucionales, indican que la deuda sigue condicionando la política y que se requiere revertir el ciclo de negociación y pago para pasar a una instancia de investigación y discusión integral del problema.

Desde Alfonsín a Menem y De la Rúa, y más recientemente Néstor Kirchner y Cristina Fernández, cada quién organizó su renegociación confirmando que el tema llegaba a su fin y que la deuda ya no sería más un problema. La retención de la Fragata y las demandas de la justicia en EEUU reflejan otra realidad.

Recuperar soberanía

Existen fondos buitres porque el país resignó soberanía jurídica en algún momento de la historia de la deuda y los negocios con el mundo.

En aras de la seguridad jurídica de las inversiones se habilitó la posibilidad de litigar en tribunales extranjeros, del mismo modo que la Argentina suscribió la incorporación al CIADI, el Comité del Banco Mundial para atender los reclamos de las transnacionales que se sienten afectadas en sus negocios por los países. Así Argentina está sentenciada a pagar cuantiosa deuda tramitada ante al CIADI.

Lo que pretendemos señalar es que el país debe recuperar soberanía y denunciar su pertenencia al CIADI y anular toda la deuda negociada sobre base de cesión soberana.

Todo ello se puede hacer si existe voluntad de independencia. El problema no son los “buitres” sino quienes les dieron y dan de comer. El país está preso de una institucionalidad gestada en tiempos de ofensiva neoliberal que requiere ser modificada.






01 diciembre 2012

El decrecimiento como una respuesta a la sostenibilidad y la igualdad


Malgorzata Stawecka - IPS

El concepto de decrecimiento no resulta cómodo en países muy industrializados, como Estados Unidos Pero muchos sostienen que se necesita un plan de acción para impedir que la mayor economía del mundo crezca aún más, para así preservar los recursos finitos del planeta Este reclamo se acrecienta al tomar en cuenta especialmente que se proyecta un aumento de 2.000 millones de habitantes de la Tierra para 2050.
El aumento de la población, así como economías florecientes y un consumo insostenible están presionando en exceso al mundo, alterando los ecosistemas y los medios de sustento de muchos seres humanos. Global Footprint Network, un grupo internacional de expertos sobre sostenibilidad, estima que los seres humanos usan el equivalente a un planeta y medio para obtener los recursos que consumen. También generan desechos que la Tierra absorbe.